Cuastecomates, la primera playa incluyente del Pacífico mexicano

Fotos: cortesía Costalegre

Aunque México no puede presumir de contar con una gran cantidad de playas incluyentes, lo cierto es que cada vez existen más esfuerzos que esto sea de otra manera. En el caso del Pacífico Mexicano y más específicamente de Costalegre, existe Cuastecomates, un área denominada en 2016 como playa incluyente.

Ubicada a aproximadamente 5 horas de distancia por carretera de Guadalajara, Cuastecomates, resulta un lugar es ideal para personas con algún tipo de discapacidad o personas de la tercera edad, que deseen vivir una experiencia diferente al visitar un lugar completamente adaptado para satisfacer sus necesidades ya que cuenta con infraestructura e instalaciones totalmente adaptadas para tal fin, desde sus calles hasta sus servicios.

De hecho, Cuastecomates puede ser considerada una playa totalmente autosustentable en temas de atención médica y urgencias, además de que cuenta con paramédicos y servicios médicos.

Durante tu visita a Cuastecomates podrás encontrar que sus calles cuentan con nomenclatura, mapas en sistema braille y guías podotáctiles para hacer una experiencia amigable.

El destino también cuenta con el servicio de muletas y andaderas para su uso en la playa, chalecos salvavidas para adultos y niños, y una camilla especial en caso de necesitarla en el agua, convirtiendo este destino en un lugar seguro y cómodo para disfrutar la playa sin ninguna limitación.

Al estar situada en una ensenada que protege sus playas, funciona como un medio ideal para estar tranquilamente en el mar y disfrutar la experiencia sin ningún temor, ya que sus aguas son poco profundas y su suave oleaje ofrece una sensación de relajación y bienestar que te llevarán a un estado de meditación.

Si caminas por la playa, encontrarás varios restaurantes de especialidades en mariscos, todos estilo palapa, como corresponde a un pueblo de pescadores; donde podrás encontrar una sabrosa variedad de pescados, mariscos frescos vistas inolvidables.

La zona combina las impresiones de una selva tropical, una playa de fina arena gris e imponentes acantilados. Aquí se pueden practicar diversos deportes como vela, natación, buceo, windsurf y esnórquel.

Gracias a todo lo anterior, las discapacidades visuales, motoras y auditivas ya no son una limitante para disfrutar plenamente de la playa y disfrutar de unas vacaciones de forma segura tanto para las personas que sufren la discapacidad como para sus acompañantes.