El turismo fuera de la agenda nacional

20 de Mayo de 2020 en |Reuniones


Luego de un análisis detallado y puntual, donde pondera las bondades del turismo, el doctor Francisco Madrid Flores sostiene que, si bien la industria no se derrumba, sí presenta una desaceleración y camina por la brecha de la contracción.


Fotos: Archivo


El Director del Centro de Investigación y Competitividad Turística (CICOTUR), de la Universidad Anáhuac, concedió una entrevista a Confines, donde reconoce los atributos y contradicciones del sector; “por un lado somos un país con una gran vocación turística, pero aún tiene mucho por capitalizar con relación a lo que hemos hecho, sin dejar de reconocer que lo que tenemos es muy importante”.


México es un país con vocación turística, pero no somos un país turístico, “somos competitivos en ciertos destinos, en algunos segmentos como sol y playa, no lo hacemos mal en cultura, pero estamos concentrados; pocos mercados, pocos destinos: Los Cabos, Cancún, Puerto Vallarta, Ciudad de México y Guadalajara”.


Madrid Flores considera que el mundo nos sigue viendo como un país importante, una referencia, y por tanto, una de las naciones más visitadas. Hay aportaciones que se realizaron en México, como es el caso de éxito llamado Cancún. “En suma, somos un país importante en la arena turística, pero nos hemos orientado hacia dos partes: Estados Unidos y Canadá, y tenemos poca visibilidad en Asia, ahí no existimos”. Y remata: “Para el tamaño de país, para el potencial que tiene, aún tenemos mucho terreno por recorrer”.


El catedrático nos recibió en la Sala de Profesores del Edificio de Posgrado de la Universidad Anáhuac, donde explicó, con rigor académico, la importancia del turismo para el país; representa el 9 % del Producto Interno Bruto (PIB); genera un saldo positivo en la balanza turística de 14 mil 500 millones de dólares, contra 20 mil millones de dólares de déficit en petróleo y, por si fuera poco, 4 millones de empleos, principalmente para jóvenes y mujeres en un país donde hay millones de “ninis” y una nación que necesita condiciones más equitativas de género, donde la mujer tenga una presencia importante.


El turismo también contribuye a paliar los grandes problemas nacionales como son la marginación, la pobreza y el rezago social. Los estados turísticos como Baja California, Quintana Roo o Yucatán, por ejemplo, tienen niveles de pobreza por debajo de la media nacional, a diferencia del sursureste, donde los niveles de pobreza son muy graves.


Es por demás decir, apunta, que el turismo juega un papel clave en el México actual; sin embargo, “no hemos logrado traducir esa importancia en las decisiones correctas, en el convencimiento pleno y ahora estamos entrando en una fase de desaceleración del turismo”.


Inició el recuento del panorama turístico y empezó con el periodo 2012-2017, cuando el sector tuvo un desempeño formidable, como nunca. “Superamos la crisis producida allá en 2009-2010, que golpeó a la industria a propósito de la gran recesión; también el delicado momento en materia de inseguridad, y luego, en mayo de 2009, con el remate del virus de la influenza A1HN1, y un elemento adicional con la salida de Mexicana de Aviación.”


Comentó también que “todavía el 2011 y 2012 fueron años malos, pero desde entonces para adelante crecimos en turismo internacional en tasas de dos dígitos, tanto en turistas como en la captación de divisas”. Desafortunadamente en 2017 se produjo un cambio en la tendencia en el plano internacional, provocada por las alertas de viaje, especialmente duras, del gobierno americano, con señalamientos hacia algunos destinos turísticos.


Ya entre el 2018 y 2019 tuvimos crecimiento bajo; “no obstante, escuchamos informaciones desde fuentes oficiales en las que se habla de un crecimiento muy grande del turismo el año pasado. Debemos tener cuidado, porque hubo un cambio de metodología; desde 2018 el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) se hace cargo de los operativos de medición de los flujos turísticos internacionales. Hoy se miden los ingresos y no los viajeros que llegan por la vía aérea”.


¡Cuidado con las cifras¡


Pese a ello, a partir de septiembre, ya cambiando los datos de la nueva metodología del INEGI, se confirma una tenencia de desaceleración turística, “no es un derrumbe del turismo, es simplemente un momento en el que estamos creciendo muy poco; en algunos rubros hay señales de decrecimiento”, afirmó.


“Nos afectó el problema del sargazo, el cual pegó a los destinos del Caribe mexicano; y la inseguridad es la variable crítica que está detrás, como un lastre al gran despegue del turismo mexicano; destaca también la falta de recursos públicos para la promoción turística en un mercado de alta competitividad, donde otros destinos siguen invirtiendo.”


La redirección de flujos turísticos hacia Republica Dominicana y otros destinos del Caribe, “nos quitó un millón de asientos aéreos; se dice fácil, pero es una cantidad importante que contribuyó a dicha caída”.


De esta forma los datos de la marcha económica del turismo arrojan datos mixtos. Hay un crecimiento marginal en el PIB turístico en el tercer trimestre del año pasado de menos del 1 %, y hay una caída del 1.5 % del consumo turístico del mercado interno. “Por eso decimos que ya transitamos por la vía de la desaceleración, con algunos signos de una posible contracción”.


Para el académico el turismo solo ha tenido dos momentos en los cuales se le puede catalogar como prioridad nacional, “que está en la ley, pero no se ha materializado”. La primera en 1970, cuando se creó Cancún; en ese momento el gobierno alineó todos los elementos para dotar de un polígono de tierra, un plan maestro, infraestructura, conectividad, promoción, todo. Y así nació este polo turístico que, por cierto, “cumple 50 años este próximo mes de abril”.


El otro momento fue en 2005; nuevamente, por la importancia del destino en la vida nacional y la economía del país, el gobierno se volcó para articular todas las medidas y solucionar el grave problema de Cancún causado por desastres naturales. Luego de muchos años, finalmente comenzó la recuperación de playas que se “fueron”, no por el huracán Wilma (2005), sino por el Gilberto de 1988.


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Una oportunidad sin precedente


En ese momento se reconstruyó con rapidez la Avenida Kukulcán, el eje vertebral de la vida económica de Cancún; se generaron financiamientos, condiciones fiscales adecuadas, en fin, una estrategia pública conjunta. Pero el tema, aclara, “es la falta de relevancia que tiene el turismo en la agenda nacional”.


El sector académico y la industria “no hemos sabido trasladar este mensaje a la sociedad, no logramos conmover a las autoridades, y al no conseguir situarnos como esa prioridad que somos, entonces los actores, los líderes de opinión, en sus hechos, no generan condiciones propias para que el turismo florezca de mejor manera”.


En realidad, el problema no es por falta de información turística; “la hay, y mucha, pero no hemos sabido, a partir de los datos, crear una narrativa adecuada. CICOTUR propone pasar del dato al relato en turismo, tratando de contribuir en una alianza con la industria, con el sector privado para poner de manera más visible al turismo en la agenda nacional”, concluyó el directivo.


¿Quién es Francisco Madrid Flores


Es un académico con un extenso currículo: Doctorado cum laude en Turismo, Universidad Antonio de Nebrija de Madrid; Maestría en Administración, Tecnológico de Monterrey; Licenciado en Turismo por el Instituto Politécnico Nacional; de 2008 a 2011 ocupó el cargo de Director de la Facultad de Turismo y Gastronomía de la Universidad Anáhuac México.


Durante 23 años trabajó en la Secretaría de Turismo de México y ocupó diversos cargos, como Subsecretario de Planeación y Subsecretario de Operación. Fue Representante Regional para las Américas de la Organización Mundial de Turismo.